…. A veces vienen vientos del desierto
Que inundan la nada con su todo,
Polvo fino, niebla vespertina, aire seco y un muro,
Que avanza sobre un lienzo en crudo,
Soñando rosas y clavando espinas.
Rápido movimiento suave y silencioso
Que moldea las dunas a su antojo,
Desde la cascada en la garganta hasta el jardín más frondoso.
En el interior se escucha una voz
Que atiende la suplica de la lucha y la rendición,
Esperando que el último aliento acabe en sudor,
Para cazar una nube y descansar la lluvia de invierno
En la primavera de tu sol.
..... Sueños de una noche, emoción de día y palabras que sellen lo que viví mientras vivía.